La honestidad es la mejor política.

Por ActionCOACH

En un mercado donde conseguir a las mejores personas para tu equipo es cada vez más competitivo, construir una cultura de integridad es una excelente manera de atraer y retener personal. A menudo se dice que «la honestidad es la mejor política» y en el entorno laboral actual, donde las personas tienen más opciones sobre a dónde llevar su talento, las organizaciones que demuestran una gran integridad, se convierten en líderes en su industria.

Ethisphere.com reconoce a las empresas que demuestran la mayor integridad comercial. 136 empresas de 22 países y 45 industrias, conforman esta lista. Estas organizaciones se seleccionan en una lista de criterios que incluyen liderazgo, reputación, cultura, ética, impacto ambiental y social. Para ser nombradas entre las mejores, estas empresas deben establecer políticas y demostrar integridad en toda la organización.

Desde reseñas de clientes hasta publicaciones en redes sociales y noticias, las empresas se enfrentan a una gran cantidad de pruebas sobre su integridad. Nadie está a salvo de la cultura de cancelación que establece nuevos estándares de honestidad, autenticidad e integridad.

Oscar Wilde, el dramaturgo y autor nos recuerda: “Sé tú mismo, porque todos los demás ya están ocupados”.

Puede ser desalentador para una organización controlar su constancia de integridad, pero las personas dentro de tu empresa pueden hacer mucho para reflejar esos valores más allá del lugar de trabajo. Para establecer una cultura de integridad, debes asegurarte de que varios comportamientos se apliquen de manera consistente y que haya un enfoque intransigente en rasgos específicos.

La integridad se basa en la honradez y la paciencia. Para que la integridad sea auténtica y cada área de tu empresa y su cultura se llene de ella, es necesario practicar la honestidad, el respeto y la amabilidad. La aprobación a los principios éticos y hacer lo correcto, incluso cuando nadie está mirando, es una medida clave para construir la integridad. Tomar decisiones difíciles basadas en la verdad y la responsabilidad también genera integridad con el tiempo.

Como líder, demuestras integridad al:

1. Definir claramente tus valores
2. Analizar cuidadosamente las opciones
3. Mostrar confianza en ti mismo. 

Ten en cuenta que los líderes con alta integridad también son humildes y conscientes de con quién se asocian y muestran gratitud abiertamente.

Para fomentar un entorno más basado en la integridad, asegúrate de que tu equipo aborde los conflictos de manera abierta y eficaz. La auténtica  integridad se demuestra cuando los miembros del equipo valoran el tiempo de los demás, se preparan para las reuniones y dan seguimiento a los resultados prometidos.

Los resultados inesperados de construir un lugar de trabajo centrado en la integridad son que desarrollará mejores líderes y generará diversidad dentro de la organización. Esto también conduce a una comunicación más abierta y una mejor toma de decisiones. Los equipos con altos niveles de integridad se responsabilizan mutuamente y buscan activamente aprovechar un impulso positivo en lugar de derribar ideas.

¿Qué es la integridad en el lugar de trabajo?

Se puede ejemplificar mediante muchos rasgos, como la honestidad, la lealtad, el respeto y la responsabilidad, y es fundamental para la toma de decisiones, el servicio a los clientes y la gestión de las personas que trabajan en la empresa. También es crucial para reducir errores costosos, evitar actividades ilegales y mantener los valores fundamentales de la organización como prioridad.

Los equipos que operan en un entorno de alta integridad ven un aumento de la productividad y una reducción del agotamiento, tienden a ser más resistentes y consideran que la colaboración es más orgánica. En última instancia, los miembros dentro de organizaciones con culturas que fomentan la integridad ven menos rotación de personal con el tiempo. La lealtad se construye en organizaciones de alta integridad, incluso cuando las cosas van mal, ya que confían en que los errores se tratarán con honestidad y de una manera que muestre aprendizaje y conciencia.

La honestidad como política, credo y cultura va mucho más allá de una declaración o una serie de puntos de valor. Debe estar en el corazón de una organización, sus líderes y miembros del equipo.